Hace varios años que se disponen de balas de calibre 12, menos letales. Sin embargo, los proyectiles caen en una de dos categorías: proyectiles imprecisos de corto alcance y menos letales; y proyectiles casi precisos de mayor alcance y a menudo letales.

En verdad, algunas municiones de calibre 12, menos letales, viajan a velocidades de hasta 550 fps/375 mph y transportan más de 100 joules de energía, lo que los hace a menudo letales en poco tiempo. El objetivo de Byrna, de acuerdo con su misión de salvar vidas, era diseñar un proyectil que sea muy preciso, extremadamente eficaz y con no más de 20 Joules de energía. El resultado es el proyectil de cola de aleta de calibre 12. patentado por Byrna.

Contiene una bala calibre .61, disponible como bala cinética (para entrenamiento y autodefensa), así como una carga útil de irritante químico (puramente para defensa). En ambos casos, la bala pesa cuatro gramos (4,3 g) y tiene una velocidad inicial de 312 fps/213 mph, proporcionando una energía máxima de 19,7 Joules, que, aunque dolorosa, está muy por debajo del límite letal.

Este diseño no letal de calibre 12 de BYRNA emplea un proyectil con aletas patentado. El resultado es un proyectil con rotación estabilizada, al inducir el giro usando esta tecnología patentada, Byrna creó la bala de calibre 12 más precisa jamás producida. Construido con los mismos materiales y relleno con las mismas formulaciones de los proyectiles calibre. 68 de Byrna, sin embargo, tiene mayor poder de disparo debido a su mayor carga útil: mayor velocidad, mejor aerodinámica y mejor precisión.